domingo, 31 de enero de 2016

Con espíritu guevariano

La idea del trabajo voluntario,  materializada por el Che,  es revivida  cada domingo y algunas noches, por los  integrantes del contingente multipropósito Ernesto Guevara.
Nueve años y tres meses de trabajo ininterrumpido, propician que manos de entrenadores deportivos, médicos, jubilados estudiantes y obreros  edifiquen  obras sociales o acarreen los materiales para construirlas.

 José Manuel Ante Vázquez,  profesor de la escuela técnica General  Luis Milanés, de Bayamo, y jefe  de esa tropa elite,  afirma que también edificaron  plataformas  para paneles solares en la localidad  de El Yarey.
Cuando la campaña anti aedes aegypti  se torna  candente, cambian  llana y  cuchara, brochas y pigmentos  por “la bazuca para fumigar”; cafetales, cañaverales y empresas de cultivos varios también conocen de sus hazañas.
En la actualidad su quehacer fundamental es  pintar escuelas   y otros centros de Educación, organismo de donde procede la mayor parte de sus 26 integrantes (originalmente  82), Ante Vázquez  refiere haber remozado 26 centros, “la institución pone los materiales y nosotros trabajamos sin afectar su presupuesto”, afirma.
Algunos miembros originales ya no están, pero hijos y nietos aseguran su continuidad, de ello dan fe los gemelos Nelson Pedro y Pedro Nelson, Armando Mendoza, hijo y Marcos Fonseca, cuatro de los ocho estudiantes-contingentistas.
Integrantes también  de la tropa son  Juan Perdomo y Agustín Cardoso, gloria del trabajo voluntario,  presente en todos los contingentes organizados en Bayamo.
Cada domingo Juan Carlos Carrazana Mojena,  atiende las  necesidades  del grupo,  el subdirector económico de Educación en Bayamo manifiesta su beneplácito por esta labor conjunta  y añade que  poco más de un año  de labor representa un ahorro de más de 200 mil pesos a Educación con la pintura de escuelas y otras tareas constructivas y detalla algunos de los centros beneficiados por el Grupo: la escuela  Ñico López, el centro de Enseñanza Especial  Che Guevara, el propio círculo Mario Alarcón;  pero no solo operan en la capital provincial,  Carrazana Mojena ejemplifica que  en el barrio periférico de La Mosquera construyeron una escuela “que quedó perfecta y el accionar se extiende hasta Los Ranchos, cerca de Bueycito... ”
“El impacto mayor es  que cuando  trabajadores y alumnos retornan los lunes a los centros  encuentran todo como nuevo,  es  ir concretando sueños”, dice.
Silvia Remón Lastre, directora del círculo infantil Mario Alarcón,  roba  unos segundos al incesante ajetreo habitual: “El  aporte del contingente  es una verdadera obra de amor , con la única remuneración de la  gratitud  de padres, educadores y escolares por su trabajo ágil y de excelente calidad”.
 Juan Carlos asevera que, además, la dirección  municipal en Bayamo tiene  dos grupos para el mantenimiento de las escuelas, integrado por  estudiantes de los  politécnicos Vitalio Acuña, de Bayamo  y José Costa Velázquez de Mabay…
 El toque final, la jardinería,  lo da Evencio Guerra con otros   cooperativistas de una base productiva  también denominada Che Guevara.
Las   luminarias exteriores también fueron  parte de la sorpresa para educandos, educadores y padres de los chicos del círculo infantil Mario Alarcón.

Ante Vázquez, y su grupo siguen fieles al hito  histórico concretado  por el Che  en 1961, cuando lideró el primer trabajo voluntario en el Caney de Las Mercedes, la antesala de la Sierra Maestra.






No hay comentarios :