En Santa Rita, un poblado de la provincia de Granma, germina un nuevo campeón de ajedrez quien desde los cuatro años (antes que a leer) aprendió cómo mover las fichas, cómo capturan y fue haciendo suyas algunas aperturas y defensas.
Hoy, Osmani Michel Fonseca Castillo, con nueve bien cumplidos, posee un envidiable currículum ajedrecístico pues ha participado en decenas de eventos provinciales y nacionales y en muchos de ellos ha salido victorioso.
“Aún no tengo ELO pero he competido con niños de mi edad o mayores, porque en eso no existen diferencias y yo todavía no puedo integrar la categoría 10 -11 años.”
Recientemente alcanzó el tercer lugar nacional en un evento celebrado en el Cotorro, hace dos meses estuvo en Villa Clara donde alcanzó el quinto. Ha participado en el torneo Descubriendo un Capablanca, obtuvo primer lugar en el zonal nacional categoría pioneril, figura entre las glorias deportivas y relevantes del deporte y entre los ajedrecistas más destacados de 2009, asimismo contribuyó a que Granma lograra el tercer lugar por equipos.
Nada es fortuito, Héctor el padre, entrenador del deporte ciencia, vio las dotes de Osmani y decidió cultivarlas: ya el chico pasa partidas y mantiene un estudio riguroso, empezó a hacer ejercicios de combinación en noviembre de 2011 y en junio último había resuelto mil 140 combinaciones…
Por lo demás, es un chico que juega al fútbol o a la pelota hasta que “se le apaga el sol en el lomo”, como si con tan corta edad adivinara lo positivo que esto resulta para su disciplina.
Como aspiración inmediata tiene entrar a la Escuela de Iniciación Deportiva de Granma, pero debe esperar a estar en sexto grado, pues es lo requerido.
Por lo pronto se prepara concienzudamente porque, quizás en potencia, dentro de su intelecto anide ya un Capablanca.
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