domingo, 27 de junio de 2010

Identidad cultural

Si alguien me preguntara cuán cerca está Bayamo de su identidad cultural, me pondría en un aprieto, porque la opinión que tengo de ello es sumamente contradictoria.
Por un lado podría valorar que Bayamo se encuentra a varios años luz de encontrar su identidad pues…qué se ha hecho del proverbial buen vestir del bayamés, esta elegancia se ve, en el mejor de los casos, cercenada por el uso de los omnipresentes jeans y pulóveres… qué de los dulces que caracterizaron la repostería de Bayamo y por poner sólo un ejemplo diré que se inauguró un sitio como el restaurante La Casona para rescatarlos pero de ello ya nadie se acuerda porque pasó a servir otros tipo de comestibles: pizzas y spaguettis.
Que conste: los ingredientes no eran caros ni difícil de acceder a ellos, suerte que algunos cuentapropistas y personas ligadas a la Asociación culinaria incursionan en su hechura y con eso preservan un poco del olvido…
Adónde fueron las serenatas…por qué llamar parques a las plazas públicas, por qué se abandonó esa costumbre tan bayamesa de pasear por la Plaza de la Revolución en sentido inverso hombres y mujeres en un movimiento que llevó al tálamo nupcial a muchísimas parejas, por qué el público apenas asiste a las retretas que antes eran asiduamente escuchadas jueves y domingos y que aspiro a que los ya tradicionales encuentros de bandas le comuniquen nueva vida.
Por otro lado los bayameses, sin chovinismo alguno nos sentimos dueños de una doble cubanía, o sea, nos creemos más cubanos que nadie precisamente por ser de aquí, de la ciudad que prefirió ser antorcha antes que española, estamos orgullosos de que el Himno Nacional naciera aquí, orgullosos de tantos próceres bayameses, ahora la Fiesta de la Cubanía con su Crisol de la nacionalidad va cada día más a las raíces y la fiesta en sentido general trata de que se revitalicen viejos, pero nunca caducos usos…
Las ediciones de la cubanía van al rescate por ejemplo de la muñequería de trapo, a la comida criolla que de no ser por los altos precios tendrían una mejor aceptación y adquisición… se reviven las Ferias de las Flores …pero no hablemos ya de lo institucional, el bayamés es un cubano privilegiado porque se ve a sí mismo como alguien más cercano que nadie a la identidad nacional… y tiene razón.

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