Ahora, desde la distancia impuesta por el canal de La Florida muchos ex miembros de la malograda brigada 2506 vociferan sus frustraciones y siguen amenazando a la incólume Revolución cubana a la que trataron de derrocar en 1961.
Se presentan como héroes ante la prensa norteamericana e internacional, pero todos saben que ayer tras la sorpresiva agresión que perpetraron por el sur de la provincia de Matanzas se cebaron sobre la población indefensa de la Península de Zapata y ómnibus que circulaban por sus carreteras.
Ayer,
menos de 72 horas después de mancillar las arenas cubanas, marchaban con las manos sobre
la cabeza, enjuiciados poco después
fueron liberados y cambiados por
alimentos para niños y equipos agrícolas.
Ahora
cualquiera que pueda acceder a medios digitales occidentales los verán contar
hazañas que solo ocurrieron en su asustada imaginación, armamento moderno y sofisticado
para la época se estrelló contra pocos fusilitos, aviones obsoletos y
maltrechos porque no contaron con el coraje de quienes los empuñaban y quien
comandaba esa tropa.
El
15 de abril de 1961 aviones con falsas insignias
cubanas, en realidad procedentes de Centroamérica y tripulados por mercenarios,
bombardearon aeropuertos cubanos en La Habana y Santiago de Cuba, con un saldo
macabro de varios muertos y daños. EEUU alegó en la ONU que eran pilotos
cubanos sublevados contra la Revolución. Era el prólogo de la invasión a Cuba,
por una Brigada contrarrevolucionaria, armada, entrenada y transportada por
EEUU, que arribó por la Ciénaga de Zapata la madrugada del 17 de abril. Todo el
pueblo se movilizó, y el Ejército y las Milicias, dirigidos por Fidel,
contraatacaron de inmediato. En 60 horas de duros combates fueron derrotados
los mercenarios, que se rindieron en Playa Girón al atardecer del día 19. Más
de 150 combatientes revolucionarios murieron, y varios civiles fueron
asesinados por la aviación de los invasores. Más de mil 200 prisioneros fueron entregados después a
sus amos yanquis, que reconocieron serlo al entregar a cambio de ellos medicinas
y alimentos para niños de Cuba.
Remitámonos
a la historia.
Según
publicaciones de la época de uno y otro lado del Estrecho de La Florida el triunfo
de la Revolución Cubana significó para Estados Unidos no solo una derrota moral
sino la pérdida de Cuba como colonia.
El
gobierno de Washington comenzó a ponerse nervioso debido a las reformas que
comenzaban en la isla así como el espíritu de independencia de Fidel Castro.
Durante
este tiempo la maquinaria de la CIA y el gobierno comenzó lentamente a
desarrollar complots e intrigas contra la isla.
Esta maquinaria empezó a coger fuerza después que el vice presidente Richard
Nixon se reunió con Fidel Castro en New York en 1959. Después de la reunión que duró
aproximadamente 30 minutos en la cual
Nixon mostró arrogancia y
desprecio, le mandó un memorándum al entonces presidente Eisenhower declarando
que Castro era otro comunista y que "debía ser eliminado".
No
tomó mucho tiempo para que Eisenhower iniciara una agresión abierta e encubierta
contra la isla. Entre las muchas
acciones tomó Washington antes de la invasión a Bahía de Cochinos se
destacaron:
El
financiamiento de grupos subversivos y terroristas dentro de Cuba.
El
financiamiento y abastecimiento aéreo de equipos y armamentos a grupos armados
en áreas remotas de Cuba. En las
montañas del Escambray, por ejemplo, aviones procedentes de EE.UU abastecieron
de armas y municiones a grupos subversivos.
La CIA
inició la propaganda contra el gobierno a través de Radio Swan y Radio
Escambray. Radio Swan transmitía desde
la isla Swan en el Caribe, mientras que Radio Escambray vociferaba que transmitía
desde las montañas del Escambray cuando en realidad también transmitía de la
isla Swan.
El
17 de Mayo de 1960, Eisenhower da órdenes a la CIA de entrenar una fuerza
militar formada por exiliados cubanos y en agosto asigna 13 millones de dólares
para financiar esta operación militar.
En
Nicaragua, Guatemala y Puerto Rico fueron creadas varias bases de
operación. En Nicaragua con la bendición
de uno de los más brutales dictadores, Anastasio Somoza, fue creada una base
aérea con el nombre de Happy Valley.
En
Vieques y la Playa Julora en Puerto Rico, fueron entrenados hombre ranas.
En
las afueras de Miami la CIA una base de entrenamiento para los exiliados. Además existía otra base en Louisiana.
En
Noviembre de 1960 la brigada de mercenarios comenzó el entrenamiento bajo el
auspicio de la CIA.
Es
importante conocer que los miembros de dicha brigada mayormente provenían de
clases adineradas y ex-aliados de Batista, propietarios de 27 566 caballerías
de tierra, nueve mil 666 casas y edificios, 70 fábricas, 10 centrales
azucareros, cinco minas, dos bancos y dos periódicos.
Dos
razones estratégicas explican por qué fue escogida esa área del Sur de Matanzas:
primeramente, está rodeada por pantanos, provee una barrera natural de
protección contra las fuerzas del gobierno cubano.
En
segundo lugar, esta área con dos carreteras de acceso solamente y en malas
condiciones, no solamente reforzaba una protección adicional a la brigada,
sino, le daba una mayor oportunidad a la seguridad contra ataques.
Esto
lleva a una pregunta interesante. ¿Cuál fue su misión ?
Esto
demuestra que la intención de la brigada
no era marchar triunfantemente con el apoyo del pueblo hacia la Habana
como Fidel Castro hizo cuando derrotó a Batista, sino esperar que EE.UU
invadiera a Cuba y así asumir el poder.
La
agenda de la fuerza invasora era asegurar y aguantar el área por 72 horas,
tiempo suficiente para que los EE.UU los reconocieran como un gobierno
provisional e interviniera militarmente.
Era
imperativo para Cuba derrotar esta fuerza mercenaria antes de ese tiempo,
aunque las fuerzas revolucionarias cubanas no estaban bien entrenadas ni bien
equipadas, fueron capaces de derrotar la fuerza invasora
en un corto tiempo evitando así la intervención militar de EE.UU.
En
Diciembre de 1962 el gobierno cubano intercambió a 1 113 mercenarios capturados
por el valor de 53 millones de dólares en medicinas y compotas para niños. Al menos sirvieron para algo los mercenarios.
¿Por
qué el gobierno socialista triunfó mientras que la fuerza invasora fue
fácilmente derrotada ?
En
primer lugar, el apoyo y levantamiento popular que los EE.UU y la brigada
esperaban dentro de Cuba nunca se materializó.
A pesar que hubo algunas organizaciones clandestinas, algunas de ellas
armadas, en las ciudades e incluso en las montañas del Escambray, nunca
recibieron el apoyo popular pues cometieron actos de terrorismo contra el
pueblo que los caló rápidamente.
Para
el cubano los invasores no representaban ni sus intereses ni sus deseos. Ellos no fueron vistos como libertadores,
sino como los viejos dueños que simplemente querían retomar sus propiedades y
quería devolverle a Cuba la corrupción existente antes del 59. Finalmente el espíritu de defensa del pueblo
y su rechazo a los invasores resultó en la victoria.
El
error más grande fue que los mercenarios subestimaron la voluntad y valentía
del pueblo cubano.
Se
debe rechazar otro de los argumentos de las clases pudientes de los EE.UU y los
reaccionarios cubanos-americanos al decir que el presidente Kennedy no hizo
suficiente en apoyo de la invasión, pués Kennedy y la CIA sabían bien que el
gobierno revolucionario y Fidel Castro tendrían el apoyo del pueblo y que una
intervención directa norteamericana hubiera resultado en la pérdida y daños a
miles de personas en ambos campos, esto era algo que el presidente quería
evitar.
Finalmente,
la derrota humillante de este plan dirigido por los EE.UU, consistió en una
derrota para la clase pudiente de los EE.UU que acorraló al presidente Kennedy,
empujándolo al borde de una posible invasión directa de los EE.UU a Cuba.
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